• La importancia de frenar

  Porque el ritmo de la vida estruja, a menudo los audios de los mensajes se escuchan dándole al botón de 2x para tardar, por ejemplo, 30 segundos en oírlos en vez de 60.
  Ella no. Ella habla ralentizada. Cada palabra, de principio a fin, tarda en pronunciarla casi el doble de lo que ocuparía la mayoría de la gente.
  Por eso es una persona de las imprescindibles. Porque ella recuerda la importancia de frenar para escuchar cómo circulan las gotas de lluvia sobre las hojas de los árboles, pasando de (...)

  
  
  María González Reyes | 6 de junio de 2022

• Una noche de fiesta

  Eran las 8:36 del día siguiente y habían dejado desparramados por el suelo del último bar los deseos para irse a vivir al campo juntas.
  A esa hora de la mañana coinciden en las calles las personas que salen a hacer deporte, las mujeres mayores que se apoyan en el carro de la compra para caminar y las que se niegan a que la noche de fiesta termine.
  Y es justo en ese cruce de pies que caminan a distintos ritmos donde los sueños de unas se enredan con los de las otras. Sueños que se entrelazan en (...)

  
  
  María González Reyes | 29 de mayo de 2022

• Infusión

  No hace tanto que aprendí a disfrutar del calor de una infusión por el esófago, aunque quema, a veces quema, me molesta más en la lengua. Con la sopa de arroz me pasa una de cada dos veces que la como, porque me gusta y no espero, aunque me moleste la sensación de la lengua quemada. Hay mucha gente que está de bajón o de depre o de ansiedad o de harta. Es ahí justo, en el esófago donde lo notan. Les quema, como cuando notas una infusión demasiado caliente, y produce una sensación de no poder (...)

  
  
  María González Reyes | 16 de mayo de 2022

• Conocimientos necesarios

  Tantas cosas dependen
  de haber nacido a uno u otro lado
  que es imprescindible que en todas las escuelas
  se enseñen las bases
  para aprender a volar.

  
  
  María González Reyes | 8 de mayo de 2022

• Escondite

  La ventana antigua, medio rota, bonita por vieja y por desaliñada. Palomas y dos chicas. Susurros. Caricias. Secretos.
  Azotea de la casa. Escondite.

  
  
  María González Reyes | 1ro de mayo de 2022

• Memoria cosida

  Estoy enfadada. Me parece que tengo razones suficientes para estarlo. Razones que ya eran de más hace tiempo. Estoy enfadada y escribo. Me gustaría que algo quedase, no el enfado en sí. Me gustaría que quedase el motivo del enfado, impregnado en algún lugar, para no olvidarlo. Me levanto y toco un libro. De poesía escrita como novela. Uno de mis preferidos. Ahí dejo la memoria. No dejo el enfado. Dejo el motivo del enfado. La memoria. Colocada sobre el lomo de esa novela. Y de paso le quito el (...)

  
  
  María González Reyes | 24 de abril de 2022

• Pobladoras de lo posible

  Es un día de esos de lluvia fina. De esa que te empapa aunque al principio parezca que no. Igualmente es imposible abrir el paraguas. Porque la lluvia es fina y fría y necesitas algo en la cara que te ayude a despertarte.
  Las niñas pobres se hacen mayores más deprisa. Te vas a dar cuenta en cuanto llegues. Te dijeron.
  Y desde entonces piensas que tu tarea es esa. Ayudarles a que prolonguen sus ganas de jugar a que son médicas o arquitectas o maestras, como tú.
  Porque como saben las pobladoras (...)

  
  
  María González Reyes | 10 de abril de 2022

• Dentro de un cajón

  Ella se los daba a su abuelo y él los guardaba en un cajón de su mesa en la fábrica en la que trabajó casi tantos años como los que vivió.
  Los encontraron cuando, unos días después de su muerte, fueron a recoger sus cosas. Uno sobre otro, del más actual al más antiguo, allí estaban todos los dibujos que su nieta le fue regalando.
  El último, que fue el primero que ella le dio, era unos garabatos de color verde. Después comenzaban a aparecer muchas más historias y emociones narradas con distintos trazos (...)

  
  
  María González Reyes | 4 de abril de 2022

• Los pies en el agua

  Meter los pies en el agua. Solo pienso en eso. Mis pies en el agua. Es curioso eso que ocurre. La manera de conectarse que tienen los pies y la cabeza. Si los pies están tranquilos la cabeza está tranquila. Por eso necesito meter los pies en el agua. En realidad me sirve cualquier lugar. Un charco, un balde con agua, una bañera. Aunque si puedo elegir prefiero las olas.
  Te mandé un mensaje: “no llego a tiempo”. Cuatro palabras que me costó escribir casi media hora de camino circular alrededor de (...)

  
  
  María González Reyes | 27 de marzo de 2022

• Todas nosotras

  Hay algo en eso que pasa cuando nos juntamos
  Mujeres de todas las tonalidades de voz
  Hay algo que pasa cuando estamos juntas
  y cantamos
  gritamos
  pedaleamos
  Hay algo de eso que pasa cuando nos juntamos
  de eso que solo ocurre cuando estamos juntas (...)

  
  
  María González Reyes | 13 de marzo de 2022

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