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Reseña del “Diccionario crítico de empresas transnacionales”

Luis Roca Jusmet (El Viejo Topo, nº 308, septiembre de 2013)

Jueves 26 de septiembre de 2013

«Diccionario crítico de empresas transnacionales. Claves para enfrentar el poder de las grandes corporaciones». Juan Hernández Zubizarreta, Erika González y Pedro Ramiro (editores), Icaria, Barcelona, 2012.

Tenemos aquí un libro más de una de las colecciones, Antrazyt, con las que Icaria nos ofrece valiosos materiales para nuestra formación crítica como ciudadanos. Este libro, complementado con uno anterior de la colección, La armadura del capitalismo ( de Alejandro Teitelbaum) nos da una panorámica básica para entender lo que son las multinacionales y su papel en la Economía-Mundo Capitalista. Lo digo un poco provocativamente, porque esta noción básica de Immanuel Wallerstein está ausente del libro. Como lo estaba en el libro de Teitelbaum, con el que mantuve una pequeña polémica en torno a este sociólogo, que a mí me parece grande y a él pequeño, por decirle así. Es una lástima porque sigo pensando que es uno de los analistas más lúcidos del sistema capitalista y está ausente totalmente de este libro.

Luchar por la democracia quiere decir hacerlo contra los poderes oligárquicos que hoy la limitan. El más importante de ellos, sin duda, el el poder económico de las multinacionales que se impone al poder político. Quizás esto ya lo sabemos pero es importante precisar como. Las multinacionales tejen redes específicas para hacerlo y este libro nos ayuda a entenderlas. Los mecanismos quedan bien descritos. Uno son las instituciones financieras internacionales con un poder real sobre las políticas económicas de los gobiernos. Son la gran Tríada : El Banco Mundial, El Fondo Monetario Internacional y la Organización Mundial del Comercio. Otra es la puerta giratoria que hay entre los ejecutivos y asesores de multinacionales y los gobiernos. Antiguos ejecutivos de multinacionales, por ejemplo, se convierten en Ministro de Economía ( Luis de Guindos) o de Educación ( José Ignacio Wert). Antiguos Presidentes del Gobierno pasan a asesores de multinacionales ( Felipe Gonzalez de Gas Natural y José Maria Aznar de Endesa ) seguidos de multiples ex-ministros, tanto del PSOE ( Solbes) como del PP ( Zaplana). Otro son los lobbies, grupos específicos de presión que trabajan para las multinacionales cuya función es intervenir en las decisiones políticas que les pueden beneficiar o perjudicar. El poder económico de las multinacionales es inmenso y tienen además a su favor los mass media ( falta en el libro referencias a la cuestión), que condicionan una opinión pública a partir del discurso neoliberal. Pero es que hay otro problema añadido que es que al ser los grandes ganadores de la crisis ni siquiera son capaces de pagar lo que les corresponde en una legislación más que favorable a sus intereses. Me refiero aquí a los paraísos fiscales. Parece que los gobiernos van a intervenir mínimamente en el tema, lo cual es lógico. Digo lógico porque es la propia supervivencia de su sistema la que está en juego, no evidentemente porque vayan a gobernar con una racionalidad de fines, poniendo la política al servicio del bien común. Esto ya es otra cuestión y mucho habremos de luchar y de una forma muy coordinada para cambiar los rumbos políticos de los gobiernos. Y en este combate no hay que olvidar a este monstruo con mil cabezas que son las multinacionales, cuyos interés, que no es otro que la lógica del máximo beneficio, está radicalmente en contra de los intereses de la inmensa mayoría de los ciudadanos. La lucha será dura pero inevitable. Ellas serán, sin duda, el enemigo principal para una transformación justa de la sociedad y los medios que utilizarán serán despiadados. Como siempre lo han sido y siempre lo serán.

En todo caso éste es un libro útil para entender al enemigo . Sigue un método muy didáctico con respecto a cada uno de los conceptos que trata : formula una definición, un pequeño análisis histórico y una introducción a las problemáticas actuales que plantea. Quizás podrían hacerse unos pequeños retoques formales, como eliminar palabras mayúsculas que aparecen arbitrariamente o una cierta dispersión terminológica inútil, como por ejemplo la de decir a veces multinacionales y otras transnacionales. Encuentro también que algunos términos introducidos no tienen tanta importancia como para ser tratados aquí ( por ejemplo el ecofeminismo) y que otros deberían desarrollarse ( por ejemplo : el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y la Organización Mundial del Comercio merecerán por su enorme importancia un tratamiento específico en cada caso).En todo caso nada importante. El trabajo es riguroso, sintético y nos da la información necesaria.


Ver en línea : Rebelión, 11 de septiembre de 2013.