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“El Ibex será la política exterior de España”

Entrevista a José Antonio Sanahuja en Radio Nederland

Viernes 25 de noviembre de 2011

“Mi impresión es que la política hacia América Latina va a combinar dos elementos: ideología y cierto pragmatismo”, explica José Antonio Sanahuja, Vicedecano de Investigaciones y Doctorado de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Complutense de Madrid.

En términos pragmáticos, las multinacionales del IBEX español serán las que dictarán la política exterior de la nueva España conservadora de Mariano Rajoy.

Corren tiempos en que los mercados bursátiles se han consolidado como poderes absolutos que logran hacer y deshacer dentro de las democracias. Son años en que las multinacionales presionan y definen las políticas exteriores por las que apuesta un país: ahora es el caso de España.

“Mi impresión es que la política hacia América Latina va a combinar dos elementos: ideología y cierto pragmatismo”, explica José Antonio Sanahuja, Vicedecano de Investigaciones y Doctorado de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Complutense de Madrid.

Para Sanahuja la ideología se utilizará como argumento para “castigar” a los países con los que no hay afinidad en cuanto a su concepción de la democracia o los derechos humanos. Y pragmatismo en cuanto que “vamos a ver una política hacia América Latina mucho más centrada en los intereses económicos”.

Multinacionales

Estos intereses económicos, agrega Sanahuja, serán definidos por las grandes multinacionales españolas, necesarias para la recuperación del país. “Se hace prever una relación más estrecha con Brasil, Chile, México y otros países donde las inversiones se han concentrado. Y más apegada en general a los intereses de las empresas del Ibex que actúan en la región y que son importantes para la recuperación económica española”, explica el académico.

“Mi impresión es que vamos a asistir a un mayor bilateralismo. La visión del Partido Popular es que hay dos América Latina: una buena, una mala”, continúa explicando Sanahuja. “La política exterior se va a modular alineándose con los países de mayor afinidad y donde hay más intereses económicos y proximidad, tratando de penalizar a los países con los que pueda haber más distancia”.

Reponsabilidad social de la empresa

Un ejemplo concreto es la política de cooperación al desarrollo que se anunciaba en el programa del Partido Popular, “donde se apunta a una política más centrada en la responsabilidad social de la empresa. En las alianzas público privadas y en un mayor peso del sector privado y de los intereses económicos”, dice Sanahuja.

Este nuevo giro en el accionar de la política exterior de la España conservadora se traduce en el abandono de las líneas de acción emprendidas durante los casi ocho años de gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

“Es muy probable que la principal diferencia sea en el enfoque regional que tuvo la política exterior socialista. Se apostará por un enfoque bilateral”, apunta Sanahuja, quien lo lamenta.

Porque Zapatero entendió que un marco regional permitía procesar, gestionar, las profundas fracturas, diferencias ideológicas y políticas que existen y han caracterizado estos últimos años a la región latinoamericana. Se trabajó con países que podían tener un cierto papel de mediación en las pugnas entre Venezuela y Colombia o Ecuador, por ejemplo.

Relación con Cuba

Un caso puntual será el de Cuba, explica Sanahuja. “En el primer elemento que se va a apreciar el cambio hacia América Latina es en la relación con Cuba, quien siempre ha tenido un papel simbólico para distintos gobiernos españoles. El tono de la relación con Cuba, más próximo o más distante y exigente, es una manera de indicar al electorado, de simbolizar el cambio al electorado, a pesar de que no haya cambios mayores hacia otros países”.

Ocurrió en 1996 cuando se produjo un cambio de gobierno entre socialistas y conservadores. Cuba simbolizó ese giro en política hacia América Latina. “Y lo mismo ocurrirá, previsiblemente, en el caso de Venezuela”, señala Sanahuja.

Sanahuja: “Habrá un enrocamiento de España y otros miembros de la Unión Europea en la llamada posición común de 1996, y ello puede acabar con la política de compromiso constructivo que había caracterizado a Zapatero. España era líder de una política de paulatino compromiso con Cuba y obtención de ciertas concesiones”.

“Este enrocamiento ayudará a los sectores más inmovilistas del régimen. En una lógica de acción reacción, lo cual no presagia nada positivo”.

Radio Nederland
RNW Latinoamérica, 22 de noviembre de 2011.

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