OMAL

Transnacionales en el suministro sostenible de electricidad en los países en desarrollo: estudios de caso en Argentina y Perú

SOMO

Viernes 10 de julio de 2009

El presente informe aborda el impacto del suministro de electricidad por parte de Endesa, SN Power y AES en el desarrollo sostenible en Latinoamérica. El informe examina las políticas y prácticas de las tres empresas transnacionales en materia de Responsabilidad Social Empresaria (RSE) en función de un marco teórico de indicadores para el suministro sostenible de electricidad. Se analizan las políticas de cada una de estas empresas - definidas en sus casas matrices - y luego se las compara con los resultados de investigaciones empíricas realizadas en cuatro estudios de caso sobre la situación en el terreno en Argentina y Perú. Sobre esta base y a través del análisis y la formulación de conclusiones y recomendaciones, el informe se propone mejorar la calidad y la capacidad del suministro de electricidad de reducir la pobreza y contribuir al desarrollo sostenible en los países en desarrollo.

En concordancia con los Objetivos de Desarrollo del Milenio, el creciente acceso a electricidad asequible es vital para el desarrollo sostenible. Sin embargo, las empresas de electricidad son, al mismo tiempo, una fuente importante de contaminación atmosférica y del agua, como también uno de los mayores emisores de gases de efecto invernadero en el mundo. De hecho, casi no existe otro sector
industrial con tanto potencial de contribuir al desarrollo económico y social que a la vez pueda generar un impacto negativo de tal magnitud en las personas y el planeta.

El cambio climático a paso acelerado y la demanda de electricidad en fuerte aumento en los países en desarrollo realzan la urgencia en abordar la ausencia generalizada de estándares normativos para el suministro sostenible de electricidad, identificando las cuestiones críticas que deberán constituir la base de directrices normativas y prácticas más transparentes y efectivas para el suministro de ‘kilowatts de calidad’. Luego de la ola de liberalización y privatización en los ’80 y ’90, las empresas transnacionales (ETN) comenzaron a desempeñar un papel cada vez más importante en los sistemas de electricidad de los países en desarrollo. Si bien al comienzo abundaba el optimismo por el impacto positivo ilimitado de la inversión extranjera directa (IED) de ETN en países en desarrollo, actualmente se reconoce en forma generalizada que los efectos positivos de la IED en materia de desarrollo no son evidentes, y que ciertas estrategias actuales de ETN en realidad acarrean efectos negativos en términos de desarrollo de infraestructura en países en desarrollo.

En consecuencia, los últimos años han sido testigo de un fuerte aumento de interés en la cuestión de la RSE en el suministro de electricidad, tanto de parte de gobiernos como de grupos multistakeholder, sindicatos, la sociedad civil y las mismas empresas. Sin embargo, a pesar del mayor interés en la materia, hay poco conocimiento empírico acerca del modo en que las políticas de RSE de las ETN
de electricidad se desarrollan e implementan en los países en desarrollo. Más aún, persiste la falta de estándares normativos claros para el suministro sostenible de electricidad. Recientemente, WildeRamsing llevó a cabo un amplio estudio de la literatura relevante, identificando las cuestiones críticas en materia social, medioambiental y económica como también las cuestiones transversales que
deberán constituir la base de dichas directrices normativas. [1] Las treinta cuestiones críticas identificadas conforman la base del análisis efectuado en el presente informe.

La Argentina fue uno de los primeros países en emprender reformas de liberalización del sector eléctrico, incluyendo la privatización de sus empresas públicas de electricidad. Las empresas de generación y distribución que fueron privatizadas en 1992 cayeron en parte en manos de ETN europeas y de los EE.UU. Con el 75% de la capacidad instalada del país en manos privadas, la actual participación de operadores privados en el mercado es alta, en contraste con la de las empresas estatales. Tan sólo unos años luego de su devastadora crisis económica en 2001, la Argentina sufrió una crisis energética de igual efecto debilitante cuando las medidas macroeconómicas adoptadas por su gobierno para mitigar la crisis económica provocaron conflictos con las empresas de electricidad, que percibieron en ellas una amenaza para sus ganancias y los rendimientos de sus inversiones.

La falta de inversión en infraestructura de electricidad exacerbó la situación cuando la demanda de electricidad proveniente de un sector industrial nacional en recuperación superó rápidamente la oferta. En Perú, las últimas dos décadas han sido testigo de importantes desarrollos en el sector eléctrico, que lo han reconfigurado completamente. En los años ’80, el país implementó un proceso de privatización de sus empresas estatales cuyo resultado fue que las ETN desempeñaran un papel importante en las políticas nacionales en materia de electricidad. El descubrimiento de los yacimientos gasíferos de Camisea - a fines de los ’80- produjo grandes cambios en la base de recursos energéticos y en la combinación de combustibles empleados para generación en el país. El reciente crecimiento económico de Perú trajo aparejado un aumento de la demanda de electricidad, fundamentalmente de parte de actores industriales tales como empresas mineras y de la construcción. Unida a la falta de inversión en el potencial
energético renovable del Perú, la mayor demanda de
electricidad provocó una crisis energética que, según los
pronósticos, empeorará en los próximos años.

El análisis del enfoque de RSE de las tres empresas revela
que, aunque éstas afirman incluir el desarrollo sostenible
entre sus principales prioridades, los modos en que abordan
el suministro sostenible de electricidad en los países en
desarrollo varían ampliamente. El enfoque de Endesa en
materia de suministro sostenible de electricidad se caracteriza
por una política de RSE minuciosamente desarrollada y se
basa fuertemente en los estándares internacionales
existentes. Para una empresa tan joven y pequeña como
lo es SN Power, su política de RSE fue extraordinariamente
bien desarrollada. El enfoque de SN Power en materia de
suministro sostenible de electricidad, en lugar de estar
definido en función de estándares internacionales, parece
basarse más en una concepción tradicional y profundamente
arraigada del desarrollo. El enfoque de AES en
materia de suministro de electricidad en países en desarrollo
parece menos motivado en cuestiones de RSE y más en el
duro imperativo empresario de maximizar las utilidades.

A pesar de las diferencias de enfoque respecto del suministro
sostenible de electricidad, la investigación empírica de campo
en el marco de cuatro estudios de caso en Argentina y
Perú revela que todas las empresas enfrentan dificultades
a la hora de traducir sus políticas de RSE en la práctica en
el terreno. En Argentina, los investigadores examinaron las
operaciones de la planta generadora Central Dique y la
empresa distribuidora Edelap -ambas de la empresa AES- como también de las plantas generadoras Central Dock
Sud y Central Costanera, de Endesa. En Perú, los estudios
de caso investigaron las operaciones de Endesa y SN
Power, ambas de las cuales invirtieron en empresas de
generación, transmisión y/o distribución de electricidad en
el país. Los hallazgos y análisis de estos estudios de caso
ofrecieron una serie de conclusiones importantes sobre el
impacto de las ETN en el suministro sostenible de electricidad en países en desarrollo.

- Varias comunidades adyacentes a la infraestructura
de electricidad de las ETN sacan escaso provecho de
su proximidad a las operaciones de éstas
Muchas comunidades situadas cerca de la infraestructura
de electricidad viven en situación precaria, lo cual
lleva a cuestionar tanto el compromiso de las ETN con
el desarrollo económico local como la efectividad de
sus políticas de RSE, destinadas a fomentar el desarrollo
sostenible de las comunidades en las cuales operan.
En lo que respecta el acceso a la electricidad, los
estudios de caso demuestran que, por lo general, las
ETN no abastecen a las comunidades próximas a sus
plantas generadoras de electricidad, a pesar de sus
vistosas políticas de RSE que afirman apoyar y contribuir
al desarrollo de las comunidades locales. Además,
varias de las comunidades estudiadas dieron a conocer
el impacto negativo de las actividades de las ETN en
el medioambiente y la salud y seguridad públicas. Otro aspecto crucial del desarrollo económico local
consiste en el empleo de trabajadores locales, lo cual
rara vez es el caso en las ETN investigadas.

- La falta de inversión en infraestructura hace peligrar
la salud y la seguridad públicas y provoca trastornos
en el suministro
AES recibió críticas particularmente severas por su falta
de inversión en infraestructura de electricidad, hecho
que puso en peligro la salud y seguridad públicas en la
Argentina. Residentes locales han protestado por la
caída de postes de electricidad, la explosión de subestaciones
y los cortocircuitos de transformadores.
Los trastornos en el suministro, debidos a una infraestructura
inadecuada o insuficiente, también causaron
cortes de electricidad que impactaron negativamente
en la economía local y resultaron en la imposición de
numerosas multas a la empresa por parte del ente
regulador argentino.

- Las condiciones de trabajo son buenas en general,
aunque subsiste la preocupación por la tercerización
y la seguridad del empleo
Los trabajadores expresaron que las instalaciones de
electricidad investigadas en el presente informe
parecen disponer de suficientes medidas de salud y
seguridad en el trabajo. En materia de sindicalización,
la planta Cahua de SN Power es la única que carece de
un sindicato para sus trabajadores. Sin embargo, luego
de la privatización de las empresas de electricidad -
tanto en Argentina como en Perú - hubo un gran
numero de despidos y retiros forzosos, y los trabajadores
identificaron en el sector una tendencia generalizada
y continua hacia la tercerización del personal.
Entrevistas con trabajadores y líderes sindicales revelaron
que los trabajadores tercerizados reciben remuneraciones
inferiores, tienen menos beneficios, no están
sindicalizados y generalmente soportan peores condiciones
de trabajo que los trabajadores empleados
directamente por las empresas.

- El alto potencial para la explotación de energías
limpias y sostenibles es generalmente ignorado por
las ETN, que dependen fuertemente de combustibles
fósiles y de la energía hidráulica a gran escala
Tanto la Argentina como el Perú exhiben un alto
potencial en materia de fuentes sostenibles de energía
para electricidad. Sin embargo, dicho potencial no es
explotado por las plantas locales de generación de
AES y Endesa, que hacen uso extensivo de combustibles
fósiles. SN Power sobresale entre las empresas
estudiadas, ya que se comprometió a desarrollar
únicamente fuentes hidráulicas renovables. Sin embargo,
aunque en la actualidad SN Power dispone de una
combinación de instalaciones hidroeléctricas de gran
y de pequeña escala en Perú, sus planes de expansión
abarcan únicamente plantas de gran escala, que pueden
generar impactos significativos en materia medioambiental
y social. De hecho, la operación por parte
de las tres empresas de varias plantas hidro eléctricas
de gran escala en Argentina y Perú - y sus planes de
operar instalaciones aún más grandes - deberían lanzar
señales de advertencia con respecto a una serie de
cuestiones críticas: la biodiversidad, el impacto sobre
los ecosistemas, el cambio climático y la emisión de
gases de efecto invernadero, los derechos indígenas y
el impacto sobre el estilo de vida de las comunidades.

- En general, las ETN de electricidad reconocen
su responsabilidad en lo referente a la salud y la
seguridad en el trabajo de sus contratistas, pero su
responsabilidad en la cadena de producción no va
mucho más lejos. Las tres ETN parecen reconocer su propia responsabilidad
en materia de asegurar buenas prácticas por
parte de sus contratistas directos. Se trata de un
desarrollo positivo, teniendo en cuenta el aumento
de la tercerización en el sector. Sin embargo, hay poca
evidencia de que el interés de las empresas en la
responsabilidad en la cadena de producción se extienda
más allá de este primer paso. A modo de ejemplo,
ninguna de estas empresas dispone de políticas para
abordar los potenciales impactos de las actividades de
sus cadenas de producción, como el abastecimiento
(p. ej. minería y extracción) y el transporte de
combustibles.

- Con frecuencia, el ‘compromiso’ de las ETN
con la comunidad se limita a actividades caritativas
y filantrópicas, en lugar de ser un compromiso
significativo que aborde cuestiones críticas
Las tres ETN afirman dar gran valor al involucramiento
de sus stakeholders y la participación pública en la
toma de decisiones. Sin embargo, lo que proponen sus
políticas muchas veces contrasta con los reclamos de
autoridades municipales y residentes locales en el
sentido de que las empresas rara vez buscan entablar
relaciones significativas con las comunidades adyacentes
a sus instalaciones. Este fue especialmente el
caso de las iniciativas de Endesa en materia de RSE,
que los residentes locales percibieron como centradas
principalmente en actividades filantrópicas en las
comunidades en lugar de en un compromiso sostenido
con éstas - y sus autoridades - en torno a cuestiones
de planificación y desarrollo local. Las políticas de
compromiso con la comunidad de SN Power tuvieron
mayor eco entre los residentes locales, aunque la
empresa también realiza varias actividades filantrópicas,
como la entrega de regalos navideños en comunidades
remotas y campañas de salud. Los autores sostienen
que no hay nada malo en que las ETN lleven a cabo
actividades filantrópicas y caritativas en comunidades
afectadas y con sus stakeholders, aunque observan
que, cuando se trata de cuestiones críticas, dichas
actividades frecuentemente sustituyen - o desvían
la atención de - un involucramiento de los stakeholders
y una participación pública significativos en la toma
de decisiones.

Los principales asuntos de preocupación que expresaron
las comunidades locales, los trabajadores y otros stakeholders
durante esta investigación de campo corroboran el marco
normativo de referencia - de cuestiones sociales, medioambientales,
económicas y transversales - de WildeRamsing,
y revelan que se trata efectivamente de cuestiones
críticas para las empresas de electricidad. La ausencia de
criterios claros para el suministro sostenible de electricidad,
unida a la aplicación incoherente de los diversos estándares
sociales, medioambientales y económicos que las empresas
hacen en sus políticas y prácticas, revelan claramente la
necesidad de estándares y mecanismos de monitoreo
externos a nivel internacional. Ante la falta de tales estándares
normativos internacionales para el suministro de electricidad,
las ETN deberían desarrollar políticas sobre las cuestiones
críticas que conforman el marco del presente estudio.
El estudio halló que, en general, cuando una ETN dispone
de una política y un mecanismo de implementación bien
definidos para una cuestión en particular, en la práctica
suele tener un mejor desempeño en relación con dicha
cuestión, aunque cabe notar que esta generalización tuvo
importantes excepciones. Las políticas de RSE deben ser
acompañadas de programas que permitan asegurar y
monitorear la implementación de dichas políticas y su
traducción a la práctica en el terreno en los países en
desarrollo. A su vez, el monitoreo debe involucrar a los
representantes de grupos clave de stakeholders, especialmente
comunidades locales, trabajadores y sus representantes
y personas a cargo de la planificación en materia
energética.

SOMO

- Para ver el Resumen ejecutivo en PDF (en castellano) pinchad aquí >>

- Para ver el Informe completo en formato PDF (en inglés), pinchad aquí >>


[1J. WildeRamsing, ‘Quality Kilowatts: A normativeempirical approach to the challenge of defining and providing sustainable electricity in developing countries’ (‘Kilowatts de calidad: un enfoque normativoempírico del desafío de definir la electricidad sostenible y suministrarla en países en desarrollo’), Ámsterdam y Oslo: SOMO y ProSus/SINTEF, 2009, publicación próxima, <www.somo.nl>; .